EN NOMBRE DE CAÍN (1992)

Las diferentes caras de un mismo ser
La carrera de Brian De Palma es de esas de las que yo considero dispersa y bastante descompensada, donde se juntan obras de un gran interés con otras muy flojas. Entre medias tiene films que pasan el corte pero por un margen ajustado. Hoy me apetece hablar de una de estas últimas que el director americano tiene en su carrera. A principios de los años 90 entregaba una de esas películas en la que solía mezclar varios géneros en un mismo film como esta "En nombre de Caín" (1992). De Palma efectúa con este film un thriller un tanto enrevesado que contiene tanto buenos momentos como otros que se le escapa de las manos. La historia es la siguiente, un doctor practica a su propio hijo una serie de experimentos psicológicos siguiendo los pasos en ese campo que previamente había realizado su padre. Para ellos incluso se vale de secuestros y demás atrocidades si es necesario.Todo este asunto repercute en su vida conjugal y demás a su alrededor. El elenco de actores del que dispuso De Palma se concentró en algunos con los que ya había trabajo anteriormente. Encarnando varios papeles se encuentra John Lithgow en una de esas actuaciones un poco pasada de rosca que suele ser habitual en este gran actor. Cierto que en esta película ciertos personajes se presta a ello. Lithgow aparece en aquella película del director llamada "Impacto" (1981). Haciendo de mujer del protagonista se encuentra la actriz Lolita Davidovich, que borda su papel con una actuación llena de nervio. Otro que trabajó con De Palma es el actor Steven Bauer (en El precio del poder 1983) que es la tercera pieza de este puzzle que teje el director. 

De Palma venía de tener un gran fracaso con su film "La hoguera de las vanidades" (1990) por lo que optó por hacer lo que mejor sabe (para bien o para mal) un film rebuscado que bebe de muchos referentes claros para tejer esta pieza desigual pero entretenida. Lo rueda en California y sus alrededores. Para ello articula una puesta en escena sencilla pero efectiva, con John Lithgow en varios papeles y que se debate entre varias personalidades. El film se mueve igualmente entre flashbacks y una ritmo alto de la narración. El problema de "En nombre de Caín" es su montaje, del cual el propio director comentó que no fue el adecuado. Pero que para que el público lo entendiera mejor no le quedó otra. 

Como suele pasarle al director en muchas ocasiones la película se va enredando en demasía entre varias tramas que se entremezclan, dando un poco la sensación de pérdida de coherencia. Las múltiples ventanas que abre su director terminan por componer un film atropellado, confuso y disperso. Lo bueno que tiene aún con estos defectos es que no aburre en ningún instante, tiene secuencias muy jugosas que se nos quedan en la retina. Los actores están muy bien en sus papeles, con gran compenetración entre ellos. Para ir terminando, De Palma vuelve  escribir un guión demasiado incongruente y desdibujado, que inexplicablemente siempre o por lo menos en este caso lleva irremediablemente a la autodestrucción por el buen camino del entretenimiento. Por lo menos consiguió su propósito en taquilla, siendo un éxito moderado dándole unos beneficios más que razonables pues con un presupuesto de 12 millones de dólares recaudó en total unos 37 millones. 

Puntuación general: 6/10

(fotos:IMDB. video:Jack Boom)