29 de septiembre de 2019

MUSEO DE CERA (1988)

Una visita solo con billete de ida
Si tenemos que coger un título donde los museos de cera sean sus protagonistas o por lo menos donde giran sus tramas, sin duda sería las dos clásicas, Los crímenes del museo (1933) dirigida por el gran Michael Curtiz, y la otra el remake de esta de nombre Los crímenes del museo de cera (1953) dirigida por otro grande como es André De Toth. Pero hoy toca hablar de esta "Museo de cera" que apareció a finales de los años 80. El director es Anthony Hickox que debutaba en la dirección aquí, en su filmografía lo más destacable junto a esta es su Hellraiser III: el infierno en la tierra (1992), que personalmente es para mi de las mejores de la saga. Y que nos encontramos en este museo de cera, pues a una pequeña ciudad llega un nuevo espectáculo instalado en una vieja casa. El que lleva dicho museo invita a algunos adolescentes a venir de noche a visitar el museo. Este recrea algunos crímenes famosos de la historia y también escenas y monstruos conocidos. Todo ello cobra vida una vez que van traspasando los cordones que delimitan las visitas. El film se inspira en el famoso museo de Madame Tussaud. 
Entre el elenco protagonista tenemos a caras conocidas ya con anterioridad y otras que se harán populares unos años después. David Warner (el famoso Jack el destripador de Los pasajeros del tiempo 1979), Michelle Johnson, Zach Galligan (Los Gremlins 1984) o Deborah Foreman (La chica del valle 1983, Inocentada sangrienta 1986). La película es bastante precaria en muchos sentidos, no obstante hablamos de una serie b y el debut de su director. De lo que va sobrado "Museo de cera" es de hemoglobina, pues no esquatima es unas buenas dosis del rojo elemento para impactar como reclamo ante la escasez de otras virtudes.
Otro aspecto positivo es sin duda su maquillaje, efectos especiales mecánicos y una cierta elegancia en su puesta en escena, que hacen parecer un producto de más enjundia. Por otra parte la plana dirección de Hickox y su simpleza en los movimientos de cámara no ayudan a la narración, que por momentos parece un gincana cual programa de televisión. Como muchas otras películas "Museo de cera" no puede escapar de su tiempo (y está bien así), tiene todos los clichés de los años 80 para bien y para mal.
Con el tiempo se ha convertido en una pequeña película de culto, que encierra en su género entre el terror y la comedia juvenil una amena cinta que intenta potenciar su fuerte ya antes comentado. Algunas curiosidades del film es el caso del comité censor americano MPAA quién califica las películas y dice que es tolerable para cada edad. El film tuvo sus problemas y al final no pudo quitarse de encima la calificación R. Su director tenía en mente hacer una trilogía inicialmente, pero al final solo se realizó una segunda parte bastante por debajo de esta. En definitiva una película entrañable, que se sustenta en su aspecto técnico y se estrella en la parte más cerebral. Algo tosca por momentos pero que no deja de proporcionar un agradable pasatiempo.

Puntuación general: 6/10

(fotos:IMDB.video:John McClane)

3 comentarios:

  1. No es un recurso muy usado lo de los museos de cera. Recuerdo haber visto alguna en VHS y recuerdo haber visto en televisión, House of Wax, con Paris Hilton.
    Lo interesante, por los avances, son esas entradas a otros planos, propicios para muertes violentas. Es una idea para explotar.
    Pueden gustar las películas fallidas, con humor involuntario.
    Saludos.

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  2. Admito que los museos de cera me dan miedito... no sé si me decidiría entrar a uno. Tal vez sea por todas estas historias, o no sé... pero asustan.

    Un beso.

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  3. Ochentera, gore y esos museos de cera tan sórdidos en la cinematografía. Un buen ejemplo el que nos traes Víctor de esta curiosa temática de los museos de cera en el cine. La comedias más actuales que se han realizado con respecto al tema me resultaron bastante fallidas. Un gran saludo.

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