Era
el año 1997, Argentina se encontraba en una nube de fantasía creada
a propósito para conquistar a las masas, y que más tarde terminaría
en la brutal crisis del nuevo milenio. Internet comenzaba a ser más
popular; las diferencias sociales eran cada vez mayores y más
marcadas; y la gente necesitaba y quería identificarse con
personajes más comunes, con situaciones más acordes a su realidad.
En este contexto, un joven Sebastián Borensztein, decide arriesgarse
a producir de manera independiente una miniserie de terror o, como en
lo personal prefiero clasificarla, un thriller psicológico.
Todo
comienza cuando al psicólogo Martín Mondragón (Leonardo Sbaraglia),
tras la muerte de su abuelo, se le presenta un señor de nombre José
Sagasti (Lito Cruz), reclamando el pago de una vieja deuda que su
abuelo no pudo –no quiso– cumplir. Aquí Martín se entera que es
“el garante” de su abuelo por ser el primer descendiente varón
aún en vida.
Nada
de esto sería un problema, sino fuera que el pago de esa deuda
implica entregar la propia alma al Diablo.
Martin
no cree a una sola palabra dicha por Sagasti, pero para no ser
maleducado, lo envía de un colega psiquiatra. Sagasti va, y en una
demostración de sus “poderes”, hace que este colega se
suicide... prometiéndole a Martín un infierno en vida si no cumple
con lo pactado con su abuelo.
En
ocho episodios se desarrollará esta historia, donde todo girará
alrededor de los conflictos emocionales de los protagonistas. Apunta
también, a una reflexión ética, filosófica y, porqué no, de fe. Una
miniserie que aquí en Europa seguramente pocos o nadie conoce, pero
creo que a pesar de los años vale la pena rescatar y mirar...
destacando sin dudas la excelente labor del recordado Lito Cruz.
Artículo escrito por ALMA BAIRES
Felicitaciones a Alma Baires por la buena reseña que ha escrito.
ResponderEliminarYo recuerdo esa miniserie. Me pareció una idea renovadora. Tiene una efectiva vuelta de tuerca sobre los pactos con el diablo. Es una hallazgo que Sagasti sea un intermediario.
Saludos.
Y para Alma Baires, besos, paisana.
Yo la estoy viendo ahora y me está gustando
EliminarBien por Alma, y bien por ti Víctor. Sois dos grandes cinéfilos, y me alegra veros compartir proyecto. En lo personal, hace tiempo que renuncié a ver series por cuestión de tiempo. Eso no menoscaba que me haya interesado la lectura. De hecho, es una serie que no conocía y que por la temática tratada no me importaría verla.
ResponderEliminarUn abrazo a ambos.
Yo aquí no tengo ningún mérito.. Yo compagino series con pelis...Entre semana me viene mejor las series por el trabajo, y ya el finde tiro de pelis.
EliminarUna vez más Víctor, agradezco el espacio que me das. He visto series tv desde que recuerdo, un día haré las reseñas de "los clásicos" dentro esta categoría... como seguiré presentándoles series argentinas y, porqué no, italianas.
ResponderEliminarDe nuevo, gracias...un beso.
Y obviamente para ustedes chicos que han comentado... a mi paisano, Demi, y a mi admirado Miguel, besotes enormes.
Gracias a ti querida,,,,como bien dice el nombre de este blog, aquí vale cualquier rincón del mundo.
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