El otro álbum es el de uno de esos 'héroes olvidados', y que reeditó hace una década el mencionado sello de Seattle (Light in the attic) Se trata del único disco grabado en 1974 por Lou Bond, el llamado 'trovador del soul' en la subsidiaria de Stax Records, We produce. Olvídense de la portada, donde Lou parece jugar al despiste (parece un músico jamaicano fumeta en ella), el trabajo homónimo de Bond es una auténtica joyita alejada del sonido crudo y chispeante característico del sello de Memphis, con un estilo soul-folk, sinuosos arreglos orquestales y una emotiva voz, que lo emparenta con el Terry Callier de los mejores tiempos o incluso con el tono protesta de todo un Gil Scott-Heron. Se incluyen personalísimas versiones de Bill Withers (Let me into your life), Jimmy Webb (Lucky me) o Carly Simon (That’s the way I’ve always heard it should be), pero sobre todas ellas destaca un monumento de canción de once minutos, 'To the establishment', algo así como si Al Green e Isaac Hayes hubiesen unido sus fuerzas.
Qué relax de música a estas horas. Me ha encantado saber más.
ResponderEliminarUn abrazo, y gracias por compartir.