Cuando se molesta a la bestia siempre hay consecuencias.
Vivimos
tiempos donde la actualidad cinematográfica va tan rápido que casi
nos nos da tiempo de observar lo que en realidad pasa a nuestro
alrededor. Aquellas películas que a finales de los años setenta y
toda la década de los ochenta ofrecían diversión para toda la
familia es solo ya un recuerdo lejano, una mancha en la lejanía como
una nube que se va y no volverá. El modo de hacer cine a cambiado
mucho, tanto que casi no queda espacio para esas pequeñas propuestas
que a nivel cinematográfico son más interesantes, pero que el gran
público ya ignora por completo (o casi). Los llamado hoy día
“Blockbusters” (que no es sino el nombre presuntuoso de “éxito
de taquilla”) pues muchos se pegan fuertes batacazos en ella, son
los que dominan la tierra como antaño lo hacía los dinosaurios.
Esto me lleva al tema de mi artículo, que no es sino hablar de la
cinta estrenada en el año 2017 “Kong, la isla calavera”. Sin
duda el gran simio es el monstruo mas icónico y reverenciado del
séptimo arte, por lo menos es lo que piensa un servidor (con el
permiso desde luego del otro gran monstruo que viene de la tierra del
sol naciente, hablo claro está de Godzilla). Su presencia es el
espejo donde se mira una gran ristra de animales intimidantes
llegados después. Muchas películas cuentan con la presencia de
bestias prehistóricas, engendros creados en laboratorios o
animalitos de diferentes tamaños que producen horror y repulsa en
los seres humanos. Vamos pues a viajar hasta una lejana isla perdida
en medio del océano Pacífico para hablar sobre Kong y sus
visitantes.
Producción
y actores: Para
ponernos en contexto esta película forma parte de lo que se a dado
en llamar “Monster
verse” (vamos, un ridículo nombre como tantos otros últimamente).
Esto viene de la Comic Con de San Diego en el año 2014, cuando la
productora Legendary Entertainment confirmó que habían adquirido
los derechos de muchas de las criaturas creadas por la compañía
Toho de Japón. Estos eran Mothra, Rodan y King Ghidorah. También
andan por ahí las todopoderosas Warner y Universal. Todo esto da
lugar a la creación de una serie de películas que ya empezaron a
estrenarse en 2014. Estas son Godzilla (2014), Kong, la isla Calavera
(2017), Godzilla el rey de los monstruos (2019) y la que se estrena
el año que viene Godzilla vs Kong (2020). Pero nos centramos en la
que nos toca hoy, que es
la segunda en esta nueva franquicia.
La localización de Kong,
la isla Calavera se llevó a cabo en lugares como Australia, Vietnam,
Hawaii, Nueva York, Los Ángeles y también en los estudios Village
Roadshow en la propia Australia. Estamos ante una superproducción y
por lo tanto el presupuesto es de órdago, unos 185 millones de
dólares. Ahora tocaba ver quién era el que dirigiría esta nueva
película del simio gigante, para ello se contó en la dirección con
el jovencísimo director americano Jordan Vogt-Roberts. Este debutó
con un film bastante recomendable de título Los reyes del verano
(2013), un drama sobre la adolescencia. Sin duda una apuesta
arriesgada dada la poca experiencia del director y más viniendo de
la escena independiente americana.
Tocaba
buscar al reparto que se las tendría que ver con el peludo gigante,
para ello se contó con estrellas emergentes como Tom
Hiddleston y Brie Larson (que ya había ganado el Oscar a mejor
interpretación por la estupenda La Habitación (2015), junto a
actores ya veteranos como John Goodman, Samuel L. Jackson y John C.
Reilly. Este tipo de producciones y género suele ser muy coral,
aunque luego como es lógico muchos se vayan quedando por el camino
debido naturalmente a
“pequeños” problemas a su paso. De que va:
Estamos en plena guerra de
Vietnam concretamente en 1973, un grupo de científicos convence al
gobierno para que les financie una última expedición hacia una isla
que nadie a descubierto antes de que los Rusos lo hagan, a esta se la
conoce como Isla Calavera. Se les asigna un grupo de militares los
cueles estaban a punto de regresar a casa para salvaguardar la
pacífica misión que creían tener entre manos.
En
conclusión: El resultado
final que nos encontramos en esta Kong, la isla Calavera es un film
que no engaña a nadie, una
propuesta de cine de acción y aventuras donde el ritmo es alto y hay
poco momentos
para el relax del espectador. Tanto
desde su puesta en escena, con unos efectos digitales muy logrados,
como los paisajes naturales que vemos en pantalla hacen de esta
propuesta que tenga un
acabado magnífico. En la parte actoral sin duda alguna lo mejor se
centra en el personaje de John C. Reilly (que da vida a un militar de
la segunda guerra mundial). El es el que tiene un papel más jugoso
desde el punto de vista interpretativo, pues el guión ahonda en su
vida tanto pasada como futura. Al actor se le ve suelto y pasándolo
en grande en todo el metraje. Como decía los veteranos son los que
sostienen mejor la trama y desarrollo de los acontecimientos que
vamos viendo con el transcurrir de los minutos.
La
química que se espera de los dos actores “principales” y más
jóvenes como son Tom Hiddleston y Brie Larson no termina de
funcionar. Se les ve algo dispersos y tantos sus personajes como su
peso en pantalla quedan por debajo de los veteranos. Aquí tal vez es
problema del guión, al que sin duda le falta más peso y carga
dramática a mi entender. Escrito por cierto por el veterano Dan
Gilroy (Freejack, Nightcrawler), junto a Max Borenstein y Derek
Connolly. Lo mejor que encuentro en esta Kong, la isla Calavera es la
estupenda fotografía a cargo de Larry Fong, un tipo que empezó
haciendo videoclips para gente (que me encantan por otra parte) Van
Halen o Iggy Pop. Trabajando luego en Perdidos (2004-05), Super 8
(2011) o Batman vs Superman: el amanecer de la justicia (2016). El
film ofrece puro entretenimiento que es justo lo que uno espera de
este tipo de producciones, su director se revela como todo un experto
en ello ofreciendo escenas impactantes bien coordinadas y llenas de
pura adrenalina.
Esta
segunda película de este nuevo universo que se está creando como
mínimo esta a la altura de la anterior, la cual era más profunda en
muchos aspectos, tanto en la parte dramática como en el guión más
elaborado. Pero que ambas se complementan muy bien, sin que haga
falta ver la anterior para seguir la historia. El público parece que
entendió la propuesta aquí presentada y corrió al cine dejando
buenos beneficios para sus arcas, se calcula que recaudó unos 560
millones de dólares, una nada desdeñable cifra que hace posible que
se siga apostando por esta nueva franquicia creada y que cuando leas
esto (días arriba o abajo) se estrenará la tercera pata de esta
nueva cuadrilogía. Así pues si queréis una película
de acción y aventuras en un paraje idílico (más o menos, pues la
isla está plagada de criaturas prehistóricas y peligrosas) esta es
una buena opción para una tarde distraída y amena. Esto es todo
desde mi rincón favorito.
Puntuación general: 7/10
(fotos:IMDB.video:Warner Bros. Pictures España)
(artículo escrito originalmente para Mentero.es)
(artículo escrito originalmente para Mentero.es)
Que tal Victor!
ResponderEliminarLa vi en el cine en su momento y me pase un buen rato. Estoy totalmente de acuerdo, esa aparición de John C. Reilly es de lo mejorcito de la pelicula.
Buen post, saludos!
Gracias. Ma pasó igual Fran, un entretenimiento muy bien ejecutado.
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