Esta semana la cosa va de "mudanzas"
Esta semana convoca Inma desde su blog Molí del Canyer .
"EMMA"
Desde
mi habitación ya podía oír el coche de papá en marcha, mi cuarto
se encontraba en la segunda planta, la ventana daba justo al lado más
bonito de la casa. Un gran árbol parecía como que me resguardara de
los problemas del otro lado de mi mundo. Me daba sombra en verano y
me acurrucaba cuando soplaba el viento frío del invierno. Mis padres
y mi hermano mayor ya tenían los últimos bártulos metidos en el
coche, ayer el camión de mudanzas había marchado con los últimos
muebles y demás cajas grandes y pesadas. Oigo como mi madre me llama
desde la calle, aún no me creo que tenga que despedirme de este
lugar. Tengo nueve años, y solo conozco el mundo que me ha rodeado
aquí. Un nuevo trabajo para papá es la causa de que nos tengamos que
marchar, mamá dice que es para mejorar nuestra situación, y que
todo será genial. Tendré un colegio mejor, nuevos amigos y la playa
cerca. Todo me lo pintan de bellos colores, pero acaso me han
preguntado a mi si es lo que quiero, solo soy una niña, y debo
aguantarme. Tengo la sensación de que mis padres no comprenden que
no quiero irme. Durante las dos últimas semanas no he parado de
comentarlo en la cena, pero solo consigo caricias y palabras de
negación. Claro que siendo sincera no se lo he contado todo, todos
los niños tenemos secretos, y así debe ser. Otra vez mi madre
refunfuña desde la calle, esta vez la noto enfadada. Mi habitación
ya está vacía, cargo mi última caja en mis manos, lo único que
dejo en el suelo donde estaba mi mesita de noche es un portarretrato
con una foto mía. Digo adiós para que me oiga, salgo del cuarto,
dejo la caja en el suelo y vuelvo a decir adiós. Cojo el pomo de la
puerta y cierro. Noto un pequeño frío en mi cuerpo, mientras desde
el otro lado de la puerta puedo oír como Emma está llorando al
dejarla sola. Nunca te olvidaré, quizás venga una nueva familia con
niños con los que puedas jugar.
simplemente entrar en tu blog alegra el alma..
ResponderEliminarme hace sentir como que es domingo y brilla el sol
Vaya,,,muchas gracias. Un saludo
EliminarAich, los fantasmas tienen sentimientos.A veces, uno tiene que irse de dos pasados. el propio y el ajeno.
ResponderEliminarBesos.
Pues si,,,,todos tenemos sentimientos, incluso los menos insospechados.
EliminarUn saludo
Muy lindo y con ese misterio al final, de casa encantada por la presencia de un ente llamado Emma.
ResponderEliminarEs cierto por otra parte que en las mudanzas quizás los que más sufren son los pequeños ya que ellos a priori no comprenden el porqué de irse ...Ellos solo saben que dejan a sus amigos y sus recuerdos.
Felicidades, y un abrazo.
Si, los que más sufren son los niños, pero curiosamente luego son los primeros en adaptarse a lo nuevo.
EliminarUn saludo
Los amigos imaginarios, pero tan reales para los niños/as, claro que si!!! es difícil despedirse, y siempre quedara en su recuerdo mas intimo y secreto.
ResponderEliminarMuy tierno, me ha gustado.
Un abrazo.
Bueno, en este caso tan imaginarios no son jeje
EliminarUn saludo
Quizás haya alguna manera para Emma pueda mudarse con ellos...
ResponderEliminarhay amigos imaginarios que resultan ser muy reales! Un abrazo
Me temo que Emma está anclada a esa casa......
EliminarUn saludo
Me has recordado la película "Los otros", un fragmento donde se marcha el niño y la niña fantasma lo observa desde la ventana.
ResponderEliminarSaludos, Víctor
Es un género que no deja mucho espacio para la improvisación.
EliminarUn saludo
entrañable el relato, uno espera otra cosa -un amorío, un secreto sombrío- y sorprendés... saludos
ResponderEliminarGracias JLO..me gusta intentar sorprender.
EliminarUn saludo
Las almas que quedan, ahí se quedan, dejando que Emma siga su camino. Muy bueno, espectacular la verdad.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz día
Muchas gracias Albada, si, hay almas que están sujetas a un sitio concreto
EliminarUn saludo
No tengo claro si Emma es una amiga imaginaria o un ente que habita la casa, pero me encanta ese halo de ternura que solo puede salir de una niña de nueve años. Precioso, gracias por participar. Besos.
ResponderEliminarLa ternura de un niño es una de las bellezas de este mundo. Me temo que de imaginaria no tiene nada jeje.
EliminarUn saludo
Enternecedor relato. Siempre, creo yo, que una parte nosotros queda
ResponderEliminaren el lugar de donde partimos.
Un abrazo, Víctor
Gracias Myriam. Eso siempre, por mucho que uno se mueva, las raíces están sujetas a un lugar.
EliminarUn saludo
Es sorprendente tu relato. Parece que Emma tendrá que sobrellevarlo, pero con suerte encontrará una nueva amistad. O esa amistad nueva la encontrará.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias. Eso parece, o se hace amiga de la nueva familia, o los atormentará jeje.
EliminarUn saludo
Siempre quedan nuestros fantasmas en los lugares en los que hemos vivido y en nuestra memoria queda una cicatriz de aquellas vivencias.
ResponderEliminarMe gustó mucho tu aporte.
Si, así es, aunque si son reales, ya te digo yo que salgo a toda leche de ese lugar jeje. Gracias
EliminarUn saludo
Más que una mudanza, el auténtico paso a la madurez...
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