Ya que hoy es Sábado, que mejor que pinchar algo tan party para celebralo como el tercer disco de VAN HALEN. El grupo en estado de gracia publicaba en 1980 su álbum "Women and children first". Otro pelotazo de hard rock tan visceral como divertido. La banda tocada por una varita mágica se encontraban en lo más alto del candelero mundial. Para este trabajo el grupo pule un poco más su sonido. Y arriesgando en composiciones más intrincadas. Ahí está ese "Loss of control".
El grupo es sin duda la auténtica sensación en América. Y lo demuestran con cada disco, y su cada vez más grandes giras para presentarlos. El álbum es robusto, donde el hard rock se funde con pequeños toques hacia otras latitudes sonoras. Solo hay que oír esa joya que es "Could this be magic". Si hay dos temas que me apasionan de este trabajo, son sin duda "Everybody wants some" y la que abre la cara A, "And the cradle will rock...". VAN HALEN en el olimpo. Chulería a borbotones, junto a músicos de alto pedigrí. Un trabajo que solo puede producir euforia sónica.
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